La mayor parte de los desafíos a los que se enfrentan las organizaciones actualmente están relacionados con la rápida evolución tecnológica, la globalización y los cambios en las demandas del mercado. Estos cambios que tenían previstos tomar años, se vieron acelerados desde la pandemia, obligando a las empresas a adoptar nuevas formas de trabajo y colaboración.
Esto trajo consigo la necesidad de desarrollar nuevas habilidades para respaldar estos cambios. Aun así, muchos líderes están de acuerdo en que la necesidad de nuevas habilidades sigue siendo más urgente que nunca, y los resultados de la Encuesta Global de McKinsey, apuntan hacia las más importantes, que son aquellas de naturaleza social y emocional, como el liderazgo, la empatía y la adaptabilidad.
Independientemente de qué habilidades se trate, la implementación de una estrategia de transformación de habilidades es más necesaria que nunca para alcanzar el éxito, y en este blog post te contamos paso a paso cómo lograrlo.
¿Qué es la transformación de habilidades y por qué es importante para las organizaciones?
La transformación de habilidades es un cambio fundamental en la forma en que las organizaciones se preparan y adaptan a las demandas cambiantes del mercado. Se trata de iniciativas de cambio y adquisición de nuevas habilidades y competencias que las organizaciones necesitarán para tener éxito en el futuro y cerrar brechas que puedan frenar su crecimiento.
La importancia de esta transformación radica justamente en la amenaza que representan para las organizaciones estas brechas de conocimiento existentes. Son muchas las habilidades que se están volviendo obsoletas mientras que surgen otras relacionadas con las demandas de industrias emergentes, como la inteligencia artificial, la computación en la nube y la ciencia de datos. La transformación de las habilidades permite a las empresas adaptarse a estos cambios y mantenerse relevantes en un entorno laboral cada vez más tecnológico.
A estos cambios se suma la globalización, que ha ampliado el alcance de la competencia en el mercado laboral y otros avances como la automatización y la digitalización, que han puesto en relevancia habilidades específicas como las sociales o emocionales, también conocidas como habilidades blandas. Estas últimas son esenciales para poder comunicarse efectivamente, trabajar en equipo, resolver problemas y adaptarse, en entornos donde es más necesario que nunca pensar de manera diferente, cuestionarse y ser agentes de cambio.
Vida útil de las habilidades
Como resultado de la adopción de nuevas tecnologías, están emergiendo nuevos grupos profesionales clave. Este panorama destaca la necesidad de desarrollar nuevas habilidades que se alineen con dichas oportunidades profesionales. Sumado a ello, investigaciones recientes indican que las habilidades generales tienen una vida media de aproximadamente 5 años, mientras que otras más técnicas tienen una vida útil más corta.
Estas últimas, suelen ser aquellos conjuntos de conocimientos como políticas, herramientas específicas para cada organización, procesos o manejo de tecnologías. Mientras que las más duraderas incluyen habilidades como la gestión de proyectos o la comunicación efectiva.
Conocer la vida útil de las habilidades nos ayuda a pensar diferente sobre su desarrollo, alentándonos a tener en cuenta su longevidad, capacidad de transferencia y pertinencia para los roles que nuestra organización podría necesitar en el futuro. También garantiza que nuestra organización disfrute de una ventaja competitiva, al enfocarse en desarrollar habilidades que estén en alta demanda y sean relevantes para el mercado actual.
Beneficios de implementar una estrategia de transformación de habilidades efectiva
Implementar una estrategia de transformación de habilidades ofrece múltiples ventajas a las organizaciones, algunas de las más importantes son:
Mejora de la competitividad
Mantener a nuestros empleados actualizados con las últimas tendencias, habilidades y conocimientos, permite a las empresas mantenerse a la vanguardia en su industria, lo cual mejora su posición competitiva.
Aumento de la productividad
Los empleados que cuentan con habilidades actualizadas y relevantes para sus roles tienden a ser más eficientes en sus funciones. Esto conlleva un aumento general de la productividad en toda la organización, mejorando los resultados generales.
Reducción de rotación del personal
No es secreto para nadie que ofrecer desarrollo profesional y oportunidades de crecimiento dentro de la empresa ayuda a mejorar la retención de los empleados. Esto a la vez reduce los costos relacionados con la rotación del personal y mejora la satisfacción de los empleados, al demostrarles que la empresa está comprometida con su desarrollo profesional.
Adaptabilidad a los cambios
Una empresa con profesionales que cuentan con habilidades actualizadas está mejor preparada para adaptarse a los cambios del mercado, tecnología o estrategias. Esta preparación permite a las organizaciones poder responder de manera efectiva y oportuna a los desafíos y oportunidades emergentes.
Fomento de la innovación
Promover un ambiente de aprendizaje continuo estimula la creatividad y la innovación entre los empleados, lo que puede conducir al desarrollo de nuevas ideas, productos o procesos dentro de la empresa. Al mismo tiempo, este desarrollo interno de habilidades reduce la dependencia de contratación externa para cubrir brechas.
En general, a través de la transformación de habilidades las empresas se aseguran de estar preparadas para enfrentarse a desafíos y cambios futuros, así como aprovechar las oportunidades que surjan, asegurando su relevancia y capacidad de crecimiento a largo plazo.
Paso a paso para una transformación de habilidades exitosa
Una estrategia de transformación de habilidades es la mejor manera de cerrar brechas, incluso antes de contratar o reubicar empleados. Según McKinsey, entre el 71 y el 90% de las empresas que comenzaron a implementar esta transformación han tenido un impacto positivo en su desempeño, satisfacción de los empleados y reputación corporativa. De modo que, si estas buscando impulsar la transformación de habilidades en tu organización, aquí te dejamos un paso a paso para lograrlo de manera exitosa:
1. Evaluación de habilidades actuales y brechas existentes
Para comenzar, es importante hacer una evaluación de las habilidades actuales de los profesionales de tu empresa, que determine cuáles son las áreas que necesitan mejorar o desarrollar. Esta evaluación o análisis implica también comparar la oferta actual de habilidades de la empresa con la demanda de ciertas habilidades que podrían necesitar, en función de su modelo de negocio.
Para lograrlo puedes recurrir a diversas herramientas como la autoevaluación, la solicitud de retroalimentación de compañeros, supervisores o mentores para obtener una perspectiva más amplia. E incluso, la utilización de herramientas de evaluación en línea como cuestionarios o pruebas que te darán resultados más objetivos.
2. Establecimiento de habilidades futuras
Cuando estén definidas las habilidades actuales, es el momento de identificar las habilidades futuras, las necesarias en el mercado laboral. Esta es una tarea que requiere una investigación de tendencias industriales y pronósticos de empleo para cada campo, y para lograrlo puedes obtener información actualizada de expertos. Debes tener claro cuáles son los objetivos de tu organización en esta etapa, ya que las habilidades que tu fuerza laboral necesita desarrollar deben alinearse con los objetivos empresariales.
3. Desarrollo de un plan de aprendizaje personalizado
Con las habilidades actuales y futuras identificadas, es momento de desarrollar un plan de aprendizaje personalizado, que debe comenzar con el establecimiento de metas claras y alcanzables para el desarrollo de tus profesionales. En esta fase también debemos considerar qué formatos de aprendizaje vamos a utilizar, qué tipo de experiencia queremos ofrecer a nuestros empleados y la infraestructura necesaria para ello, por ejemplo, plataformas de aprendizaje o sistemas de gestión.
Investiga qué recursos de aprendizaje son más adecuados para ti, como cursos en línea, tutoriales en vídeo o presentaciones. Crea un calendario o plan de acción detallado que incluya plazos realistas para completar cada etapa del aprendizaje.
4. Implementación y práctica
El cuarto paso implica la ejecución y entrega del plan de desarrollo de habilidades en todas las escalas de la organización. En esta etapa debes asegurarte de que los empleados dedican tiempo al aprendizaje, siempre ofreciendo opciones flexibles y que se ajusten a su ritmo de trabajo. Busca oportunidades para que los empleados pongan en práctica las habilidades adquiridas en situaciones de trabajo, bien sea a través de proyectos colaborativos o ejercicios de simulación. Por último, evalúa el progreso regularmente y ve ajustando el plan de transformación según sea necesario.
Desafíos comunes en la transformación de habilidades
Ya hemos visto los beneficios de una estrategia de transformación de habilidades. Sin embargo, es también necesario conocer y abordar los desafíos más comunes a la hora de implementar esta estrategia:
Dificultad para identificar necesidades de habilidades
Muchas veces determinar qué habilidades son las más relevantes y necesarias para la empresa y sus empleados puede resultar desafiante. La falta de una evaluación precisa de las necesidades de habilidades puede llevar a programas de desarrollo ineficaces que no abordan las necesidades principales. Una evaluación exhaustiva y el trabajo en colaboración con los líderes del equipo y los empleados puede ayudar a identificar de manera más sencilla estas áreas.
Falta de recursos
La falta de recursos ya sea en términos de tiempo, presupuesto o acceso a programas de formación adecuados, puede obstaculizar los esfuerzos de transformación de habilidades. Las empresas deben asegurarse de asignar los recursos necesarios y proporcionar las herramientas adecuadas para que sus empleados tengan acceso a oportunidades de desarrollo. Al mismo tiempo, asignar métricas claras para evaluar el éxito de los programas para determinar el retorno de la inversión.
Resistencia al cambio y cultura organizacional
Por último, la resistencia al cambio puede surgir de empleados que se sienten cómodos con sus habilidades actuales o que temen a lo desconocido. Esto puede deberse a una cultura organizacional que carece de estructuras que fomenten el aprendizaje continuo, la adaptabilidad y la innovación. Superar esta resistencia va a requerir un liderazgo solido que promueva la cultura de aprendizaje y crecimiento. Si quieres aprender cómo impulsar una cultura corporativa positiva y orientada al desarrollo, te invitamos a leer este artículo.
La importancia de una cultura de aprendizaje continuo en la transformación de habilidades
Un factor de éxito dentro de la implementación de una estrategia de transformación de habilidades es la cultura de aprendizaje continuo. Este término hace referencia al conjunto de esfuerzos o acciones que fomentan el conocimiento y el desarrollo continuo de habilidades dentro de una organización, y no debe ser subestimada.
Una cultura que fomente el aprendizaje continuo no solo ayuda a las empresas a mantenerse competitivas, sino que también impulsa el crecimiento y el desarrollo de los empleados. La combinación de estos factores resulta en un entorno donde los empleados se sienten motivados y empoderados para mejorar constantemente y les resulta más fácil adaptarse a posibles cambios y transformaciones en el panorama laboral.
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