El adaptive learning (aprendizaje adaptativo) es un método de formación que, como su propio nombre indica, se centra en las necesidades y preferencias de cada uno de los alumnos para multiplicar los resultados de su formación. Entre los múltiples beneficios que supone para las empresas, está el de mejorar la experiencia de aprendizaje, convirtiéndola en más satisfactoria y beneficiosa para los profesionales. Sin embargo, este no es el único. Si quieres saber más sobre el adaptive learning y las ventajas que puede generar en tu plan de formación corporativa, ¡sigue leyendo!
Adaptive learning: las claves de su éxito
Para poder definir un programa de aprendizaje como adaptativo, necesita cumplir una serie de condiciones básicas:
- Debe centrarse en contenido relevante para el alumno. Además, este contenido deberá ser más práctico que teórico. O, lo que es lo mismo, aplicable en su día a día.
- Debe dirigirse a cada estudiante de forma individual en base a sus necesidades y preferencias.
- Tiene que ser un aprendizaje activo donde el alumno esté en constante interacción con los recursos y actividades.
Además, para que el aprendizaje adaptativo sea realmente efectivo, es fundamental poder medirlo y optimizarlo. Para ello es necesario que las plataformas e-learning que empleemos para su despliegue cuenten con esa posibilidad de extraer y analizar datos. De esta forma, podremos saber exactamente intereses, actividad y progreso de cada empleado, y generar contenidos más eficaces.
¿Por qué el adaptive learning es la mejor opción para tu empresa?
- Genera un mayor compromiso de tus empleados:
Al encontrar contenido realmente relevante para ellos, la motivación de tus colaboradores aumentará, al igual que la retención del conocimiento. A todos nos gusta aprender de una forma única en la que tengan en cuenta nuestras necesidades.
- Aumenta la productividad:
Los empleados no necesitan aprender todo, sino solo aquellos contenidos que realmente les son útiles para llevar a cabo sus tareas diarias y desarrollarles como profesionales. Además, serán más autónomos a la hora de formarse, lo que ayudará a optimizar el tiempo y esfuerzo de gestión de la formación.
- Mejora la gestión del tiempo de formación:
Gracias al aprendizaje adaptativo, tus empleados podrán reducir el tiempo que emplean en la realización de un curso. De esta forma, ese tiempo que antes empleaban en su formación, ahora podrá ser utilizado para realizar otras tareas de valor.
Cómo ponerlo en marcha en tu compañía
Lo primero de todo es tener en cuenta los diferentes modelos para hacerlo.
- El modelo de empoderamiento
Este modelo destaca la necesidad de empoderar al estudiante/empleado, de modo que tenga el control de su aprendizaje. ¿Cómo lo hacemos?
- Creando itinerarios formativos con contenidos abiertos, donde cada profesional pueda diseñar su propio aprendizaje, eligiendo aquellos cursos que necesite.
- Creando cursos en los que los alumnos no estén obligados a visualizar todo el contenido, sino solamente aquellos contenidos que les sean útiles de verdad, pudiendo omitir aquellos que no sean relevantes para su formación.
- El modelo de caminos
Este modelo recibe su nombre debido a que cada estudiante o grupo de categoría recibe una ruta o camino de aprendizaje basado en sus necesidades. Pero, a su vez, este camino forma parte de un viaje de aprendizaje global y más amplio. La ventaja de estas rutas de aprendizaje es que pueden ser diseñadas por la organización o por el propio empleado, permitiéndole controlar las interacciones que determinan los próximos pasos del camino.
- El modelo de diferenciación
Este modelo se basa en que el contenido de un curso es diferente según el compromiso, el nivel de motivación, el conocimiento previo o los valores de los empleados. Aquí, el organizador puede diferenciar a los alumnos asignando agrupaciones o permitiéndoles identificarse a sí mismos.
- Los assessments de entrada, que evalúan el conocimiento y habilidades previos de los empleados, son muy útiles en este sentido
- La inteligencia artificial está aportando también soluciones muy interesantes en este sentido, ayudando a definir de forma automática qué tipo de contenido se muestra a cada estudiante.
Una vez elegido el modelo, es necesario seleccionar una solución e-learning que nos ayude a implantar este tipo de aprendizaje.
En la actualidad, existen plataformas de formación online que van mucho más allá de los tradicionales LMS. Con interfaces más modernas e intuitivas, que imitan la experiencia de usuario de plataformas de streaming como las populares Netflix, Amazon Prime o HBO; y con un modo de organizar la información mucho más dinámica. Además, gracias a sus funcionalidades de machine learning e inteligencia artificial, facilitan el acceso a tus contenidos formativos en base a las necesidades e intereses de tus usuarios. ¿Quieres saber más? Descubre isEazy LMS, y crea una experiencia de aprendizaje única.