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Power skills imprescindibles para tu equipo en 2024
septiembre 10, 2024
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Tecnologías como la inteligencia artificial que ayudan en la automatización de tareas y optimización de procesos, son cada vez más importantes para las organizaciones. Sin embargo, el mercado laboral actual se enfrenta a una escasez de profesionales capacitados en estas disciplinas emergentes. Esto ocurre con muchas otras tecnologías, planteando un desafío para las empresas que necesitan adaptarse constantemente para mantenerse a la vanguardia.
En otras palabras, estamos ante un entorno en el que las empresas se arriesgan a enfrentarse a un déficit profesional para ocupar determinados cargos que requerirán habilidades específicas. Estos cambios obligarán a organizaciones grandes y pequeñas a actualizar sus plantillas a través de la formación, o arriesgarse a quedar obsoletas. Y de ahí que cobre especial importancia el upskilling y reskilling.
Los términos reskilling y upskilling hacen referencia a estrategias centradas en el desarrollo y la mejora de habilidades que permitan a los profesionales y a las empresas mantenerse competitivos y relevantes en un mercado laboral en constante evolución. Ambos enfoques que atienden a las necesidades formativas de los empleados no solo permiten a las empresas cubrir brechas de talento, sino que además ayudan a promover un entorno laboral de crecimiento y desarrollo.
El reskilling se traduce al español como reciclaje profesional o reaprendizaje, y su objetivo principal es la formación del empleado en habilidades que amplíen su experiencia, de modo que sus perfiles se puedan adaptar a nuevos cargos dentro de la empresa. Esta estrategia mejora la competencia general del empleado volviéndolo más versátil y es crucial para ayudar a los profesionales a mantenerse empleables y relevantes ante los cambios.
El upskilling por otro lado, se refiere al proceso mediante el cual un individuo adquiere nuevas habilidades o mejora las existentes en su campo laboral. Es una estrategia que busca reforzar las habilidades y actualizar las competencias de un empleado, para mantenerlo al día con los avances tecnológicos, tendencias y demandas cambiantes. Es esencialmente un enfoque de desarrollo profesional continuo que permite a las personas avanzar en sus carreras.
La diferencia principal de estas dos estrategias radica en el objetivo de la formación. Mientras que el reskilling abre oportunidades para cambiar de puesto, función laboral o incluso apostar por nuevas vías profesionales, el upskilling da valor al perfil del empleado dentro de la empresa.
Otra de las grandes diferencias reside en la elección de las habilidades. En una entrevista para BBVA, Elisabet Bierge, socia y directora de negocios de Adqualis Executive Search, asegura que el reskilling prepara o recicla al profesional para que asuma una tarea para la cual ya posee soft skills o habilidades blandas, más no posee hard skills o competencias técnicas. En cambio, el upskilling refuerza las soft skills de modo que el empleado pueda tomar mayor responsabilidad, y además perfeccionar o incorporar nuevas perspectivas al trabajo que ya realiza.
Actualmente, las empresas buscan trabajadores con habilidades muy diferentes a las de años anteriores, y es ahí donde volver a formar, es muy valioso para mantener las competencias básicas, en vez de buscar nuevos empleados para llenar esos vacíos.
El reskilling es importante para una empresa porque a medida que la tecnología y la automatización se integren y avancen, estas brechas de habilidades seguirán apareciendo. Por otra parte, priorizar el upskilling es vital para generar ventajas competitivas en el mercado. A través de esta estrategia es posible responder a la necesidad de herramientas de liderazgo y garantizar la longevidad de ciertas carreras.
En una encuesta realizada por McKinsey, el 53% de los líderes indicó que desarrollar habilidades era la mejor forma de cerrar las brechas de competencias. El upskilling y reskilling fomenta la cultura de aprendizaje en las empresas y ayuda a distinguirse del resto de la competencia porque transforma a una plantilla en agentes ágiles, diversos y creativos que constantemente perfeccionan y adquieren nuevas habilidades. Veamos algunos de los principales beneficios de implementar estos programas:
El informe The Future of Jobs Report 2023, elaborado por el Foro Económico Mundial, muestra una clara evolución en las predicciones sobre las habilidades con demanda creciente para el futuro. Cuando se publicó por primera vez en 2016, las empresas encuestadas proyectaron que el 35% de las habilidades laborales se verían afectadas en los siguientes 5 años. Desde entonces esa cifra se elevó al 44 %, previendo que la adopción de nuevas tecnologías estimule la evolución de las competencias laborales según los profesionales se ajustan a los cambios que conlleva.
Estas son algunas de esas habilidades que serán clave en el futuro:
También está relacionado con el pensamiento crítico. Un empleado con iniciativa y creatividad no se limita a acatar instrucciones, sino que plantea oportunidades. Las empresas buscan cada vez más profesionales con capacidad creativa, originalidad e iniciativa, que se adapten fácilmente a un entorno cambiante y que les ayuden a entender qué es lo que sus clientes necesitan.
Las habilidades técnicas son tan importantes como las blandas, y entre ellas, el uso de la tecnología es esencial hoy. Las empresas demandan cada vez más candidatos preparados para afrontar los nuevos retos que la tecnología ha impuesto.
En este sentido, las empresas clasifican la IA y el Big Data como prioridades dentro de sus estrategias de formación, juntos con otras habilidades como el diseño y la experiencia de usuario. El desarrollo de dichas habilidades irá teniendo mayor prioridad a medida que evoluciona la tecnología.
Aunque una persona es capaz de ejercer influencia sobre otra sin tener una posición de liderazgo, un líder es incapaz de manejar o dirigir un equipo si no cuenta con la habilidad de influir en los demás.
El liderazgo de influencia es importante para trabajar las ideas de las personas, haciendo posible que estas estén alineadas con las estrategias de la empresa. De modo que un profesional que cuenta con estas habilidades logra que su equipo de trabajo adopte los valores, la misión y la cultura de la empresa.
Es una de las habilidades comunicativas que un buen líder debe manejar para poder construir equipos y entornos de trabajo de alto rendimiento. La actualidad demanda profesionales, que además de poseer conocimientos técnicos, tengan empatía, adaptabilidad y la capacidad de entender a su equipo.
La inteligencia emocional abarca el autocontrol, el enfoque de las emociones hacia la consecución de objetivos, la comunicación asertiva y la escucha activa. Y no es de extrañar que esta sea una habilidad altamente demandada por las empresas, ya que según un estudio de Capgemini, las organizaciones con empleados con altas capacidad de IE obtienen un 20% más de beneficios.
Otra habilidad que ha quedado en evidencia por su necesidad en las empresas después de la pandemia. La gestión del estrés implica la habilidad para enfrentar de manera eficiente las tensiones tanto en el ámbito laboral como en el personal. Esto requiere identificar los desencadenantes de estrés y aplicar tácticas para manejarlos y minimizar su influencia. Su desarrollo favorece la satisfacción laboral, el bienestar y un clima laboral positivo.
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Con el foco en poder cubrir los nuevos puestos laborales que han emergido y ampliar las habilidades de los empleados hacia nuevos roles, te contamos los pasos a seguir para implementar un programa de upskilling y reskilling exitoso:
Para llevar a cabo una estrategia de upskilling y reskilling exitosa dentro de la empresa, es necesario evaluar y priorizar las habilidades que se necesitan con mayor urgencia entre los empleados de la organización. Dichas habilidades deben apuntar hacia la adaptación del nuevo entorno laboral y la consecución de los objetivos más inmediatos. Y a medida que se vayan consiguiendo estas metas, es necesario ir actualizando el proceso de aprendizaje, incluyendo otras competencias que irán siendo necesarias a largo plazo.
Así como es necesario mapear las brechas en habilidades existentes dentro de la empresa, lo es también identificar el conjunto de habilidades o conocimientos previos con los que ya cuenta tu equipo. Para ello se deben recopilar las habilidades de la organización en una base de datos, que te permita distinguir a los empleados que puedan realizar una transición de manera más fácil hacia otros roles.
Para poder ofrecer una experiencia de aprendizaje efectiva, es crucial elegir una plataforma que no solo ofrezca cursos en las habilidades más demandadas, sino que también se actualice constantemente para reflejar las últimas tendencias y avances en el mercado laboral. Elige una plataforma integral, que abarque desde competencias técnicas hasta habilidades blandas y que ofrezca cursos de calidad, con elementos interactivos como vídeos, simulaciones, actividades prácticas, evaluaciones y flexibilidad para que los empleados puedan acceder al contenido en cualquier momento y lugar.
Muchas veces la perspectiva de tener que formarse o aprender un nuevo conjunto de habilidades, puede resultar preocupante o abrumador para algunas personas. Para ello es de gran ayuda mantener una comunicación activa, de modo que los empleados entiendan cómo el aprendizaje continuo es vital para la supervivencia de la empresa y para su propio crecimiento profesional.
Por último, recuerda que las organizaciones deben recopilar y analizar el progreso de los empleados para mantenerse al tanto del éxito del programa y poder reestructurar las áreas que lo requieran.
El reskilling y el upskilling brinda a los empleados la oportunidad de adquirir nuevas habilidades, conocimientos y competencias, así como ampliar sus conocimientos, haciéndolos partícipes del crecimiento y el éxito de la organización. Un buen ejemplo de ello es el caso de transformación del aprendizaje de Telefónica, la compañía española líder en infraestructuras de telecomunicaciones.
A través del mayor plan de reskilling de España, esta empresa ha conseguido que el 93% de sus empleados realizaran alguna actividad formativa, incorporando más de 1.185 cursos de diversas temáticas, transformando así su modelo de aprendizaje para ofrecer una formación más completa. ¿Quieres conocer más sobre este caso de éxito? Aquí te contamos todos los detalles.
Actualmente, las empresas deben implementar metodologías ágiles e innovadoras que se adapten al estilo de vida de los empleados. La clave es ponérselo fácil a una plantilla que busca un equilibrio entre su vida laboral y profesional. Por ello, además de poner a su disposición un plan de desarrollo de talento, los empleados deben poder elegir cuándo y dónde realizar su formación.
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