¿Te imaginas poder gestionar todos los procesos de Desarrollo y Aprendizaje (L&D) en una sola plataforma? Desde la formación de nuevos colaboradores hasta el análisis de métricas de aprendizaje y rendimiento de toda la plantilla, las Talent Experience Platforms (TXP) están redefiniendo la gestión del talento y haciendo más fácil el trabajo de los profesionales de RRHH.
Con un contexto donde el 77% de los líderes de L&D desempeñan roles cada vez más multifuncionales, según datos de LinkedIn, las TXP se perfilan como aliadas indispensables para afrontar los diferentes retos laborales. Pero ¿de qué se tratan? En este artículo, vamos a descubrir qué son las TXP, cómo se diferencian de otras plataformas como LMS y LXP, y cómo pueden ayudarte a lograr el desarrollo efectivo de los colaboradores.
Talent Experience Platform: ¿Qué es y qué valor aporta a una organización?
Una plataforma TXP es un sistema integral para gestionar el talento en una empresa. Va más allá de las soluciones tradicionales, conectando todas las etapas del ciclo de vida del empleado, desde la incorporación hasta el desarrollo profesional.
El valor de una TXP radica en su capacidad para mejorar la experiencia del empleado. Al unificar procesos, ofrece una visión completa, y permite generar empleados más comprometidos y satisfechos. En resumen, una TXP no solo unifica los procesos, sino que también fortalece la relación entre los empleados y la empresa, contribuyendo al crecimiento y éxito empresarial.
¿Qué necesidades puntuales aborda una TXP?
Las TXP permiten a los líderes de RRHH abordar todas sus necesidades relacionadas con la gestión el desarrollo y la retención del talento. Básicamente, estas plataformas integran funciones relacionadas con el aprendizaje y el rendimiento, permitiendo a los responsables tomar decisiones informadas, prever las necesidades de la empresa, cubrir brechas de habilidades y automatizar procesos, contribuyendo así a mejorar los resultados empresariales.
TXP, LMS y LXP: ¿Cuál es la diferencia?
Seguramente habrás escuchado hablar de plataformas LMS y LXP. Comprender las diferencias entre cada una de ellas es crucial para seleccionar la más adecuada según las necesidades particulares de tu organización. Por ello, aquí te presentamos las características principales de cada una:
LMS – Learning Management System
El Learning Management System (LMS) se especializa, como su nombre lo indica, en la administración eficiente de la formación. En el ámbito laboral, el foco de un LMS está en garantizar que los empleados adquieran las habilidades necesarias para sus puestos mediante la organización y seguimiento de cursos y programas de aprendizaje. Así, ofrece una gestión estructurada y efectiva de la formación.
LXP – Learning Experience Platform
Una Learning Experience Platform (LXP) se distingue por su enfoque en el aprendizaje autónomo y la colaboración entre compañeros. Al proporcionar recomendaciones personalizadas y fomentar el aprendizaje continuo, un LXP ofrece una experiencia de aprendizaje más dinámica y atractiva. Su interfaz, similar a las plataformas de entretenimiento, se adapta a las preferencias individuales de cada usuario.
TXP – Talent Experience Platform
Finalmente, una TXP se destaca por ofrecer un enfoque integral en la gestión del talento. Además de contar con las funcionalidades de un LMS y un LXP, permite analizar los resultados de la formación y su impacto en el rendimiento profesional. Por otro lado, su principal objetivo radica en mejorar la experiencia del empleado, potenciando su productividad y compromiso.
La evolución de las plataformas e-learning: Características de una TXP
Existen diferentes características y funcionalidades típicas de una TXP. A continuación, te dejamos algunas de las más representativas:
Integración total
Una TXP, como hemos visto, se caracteriza por integrar todos los aspectos de la gestión del talento. Desde la gestión del desempeño hasta el aprendizaje continuo, todo se encuentra en un solo lugar, simplificando y optimizando los procesos.
Foco en la experiencia del empleado
La experiencia del usuario es central en una TXP. Estas plataformas buscan no solo gestionar procesos, sino también mejorar la conexión emocional entre el empleado y la empresa, generando un entorno laboral más satisfactorio.
Adaptabilidad y escalabilidad
Una TXP puede adaptarse a las necesidades cambiantes de la organización y escalar a medida que la empresa crece, asegurando que la gestión del talento evolucione al mismo ritmo que la empresa.
Análisis y reportes avanzados
Por lo general, las TXP ofrecen herramientas de análisis avanzadas que proporcionan insights profundos sobre el rendimiento, la participación y las áreas de mejora. Estos datos permiten tomar decisiones estratégicas basadas en información precisa.
Fomento de la colaboración
Facilitando la colaboración y el trabajo en equipo, una TXP permite impulsar una cultura organizacional que valora la interacción y el crecimiento colectivo.
Cómo las TXP están redefiniendo la experiencia de aprendizaje empresarial
Sin dudas, las TXP están transformando la forma en que las organizaciones abordan el aprendizaje de sus equipos. ¿Cómo lo hacen? A través de la personalización del aprendizaje, una funcionalidad clave en estas plataformas.
Adaptar contenidos y métodos de enseñanza según los estilos de aprendizaje y necesidades individuales no solo mejora la efectividad de la formación, sino que también fortalece el compromiso y la participación.
Un informe de Gallup resalta que los empleados comprometidos tienden a demostrar pasión por su trabajo, superar expectativas y sentirse conectados con la organización. Además, invierten más tiempo en mejorar su desempeño a través del aprendizaje y el desarrollo. ¿El resultado? Una reducción del 41% en el ausentismo y un aumento del 17% en la productividad.
¿Cómo identificar si tu organización está lista para una TXP?
Determinar si tu empresa está lista para dar el salto a una plataforma, ya sea un LMS, una LXP o una TXP, implica tener en cuenta ciertos aspectos:
- Pregúntate si la estrategia de gestión del talento está alineada con lo que la empresa busca lograr. Si hay un desfase entre lo que se está haciendo y los resultados esperados, podría ser un indicador de que se necesita algo más completo.
- Observa si tu equipo está listo para adoptar un enfoque más integral para aprender y crecer. Si necesitas una forma más personalizada de abordar la formación, podrías optar por un LXP, que combina aprendizaje autónomo con aprendizaje colaborativo, o incluso explorar opciones más avanzadas como una TXP.
- Considera la disposición de la empresa para adaptarse a cambios tecnológicos y su deseo constante de mejorar la experiencia de aprendizaje, ya que estos son indicadores importantes al tomar decisiones sobre qué plataforma es la adecuada.
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