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Power skills imprescindibles para tu equipo en 2024
agosto 24, 2023
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En cualquier organización, grande o pequeña, los empleados se encuentran en el centro. Esto quiere decir que son el activo más importante de cualquier empresa y, por lo tanto, la forma en que los apoyes y ayudes a desarrollarse profesionalmente, definirá gran parte del éxito de tu compañía.
Si tu empresa ofrece a sus empleados planes de desarrollo del talento que les permitan mejorar sus habilidades, mantenerse motivados y aprovechar todo su potencial, ya tienes una ventaja sobre el resto de las organizaciones. Pero si aún no lo has hecho, este es el mejor momento para empezar a impulsar el crecimiento de tus empleados y comenzar a disfrutar de todas las ventajas que esta poderosa herramienta tiene para ofrecer a tu empresa. ¿Quieres aprender a diseñar un plan de desarrollo del personal efectivo? En este artículo te contamos todo lo que necesitas para lograrlo exitosamente.
Un plan de desarrollo del personal es un programa estructurado para el crecimiento profesional de los empleados. Este plan define todas las competencias y habilidades clave para el crecimiento individual de los empleados, junto con las acciones que se deben llevar a cabo para conseguirlo.
En otras palabras, los planes de desarrollo del personal son programas de formación que permiten al talento adquirir nuevas competencias y desarrollar al máximo las ya existentes. Estos planes deben incluir objetivos específicos, que sean del interés de la empresa y del empleado en igual medida, así como una estrategia bien planificada y un formato de aprendizaje que se adapte a las necesidades de los profesionales y de la empresa.
El objetivo final de esta estrategia es ayudar a desarrollar profesionales valiosos que logren eficazmente los objetivos de la organización y que a la vez se sientan comprometidos y motivados.
Los planes de desarrollo del personal son una estrategia clave que todas las empresas deberían incluir, ya que proporcionan múltiples beneficios tanto para la organización como para los empleados:
Quizás el beneficio principal de poner en marcha estos planes, puesto que un empleado con mejores competencias mejorará la calidad de su trabajo y a largo plazo, ayudará a aumentar los ingresos y la competitividad de la empresa.
Actualmente, la mayor parte de las organizaciones están atravesando un proceso de transformación digital, que impacta en la manera en que llevan a cabo sus operaciones, y según Gartner, el 70% de los empleados no domina las habilidades necesarias para sus trabajos actuales o no tienen las habilidades necesarias para cubrir otros roles en el futuro.
La manera más efectiva de mantenerse al día con los cambios del panorama laboral y ayudar a los empleados a que puedan satisfacer las futuras necesidades de la organización, es a través de planes de formación que les ayuden a desarrollarse. De esta manera no solo mejorarán sus habilidades, sino que alcanzarán una ventaja frente a la competencia.
En relación con el punto anterior, para lograr una ventaja competitiva se necesitan empleados satisfechos que vean posibilidades de avanzar en sus carreras profesionales. Según Gallup, el 87% de los millennials, que forman parte de la mayor fuerza laboral en la actualidad, consideran que su crecimiento y desarrollo profesional son muy importantes a la hora de considerar un trabajo. Pero no solo ellos, el 70% del resto de los trabajadores opinan igual.
Los empleados se sentirán más satisfechos y comprometidos con una organización que está dispuesta a invertir en su futuro. De hecho, el 94% de los empleados permanecerían más tiempo en una empresa si esta invirtiera en su desarrollo profesional. De modo que, implementar planes de desarrollo del personal no solo disminuye la tasa de rotación, sino que es más probable que otros profesionales soliciten empleos en organizaciones que realizan estas prácticas.
Según el informe The state of the Global Workplace, elaborado por Gallup, el 85% de los empleados a nivel mundial se sienten desconectados de sus trabajos. Mientras tanto, las empresas que ponen en marcha planes de desarrollo del personal tienen una tasa de productividad un 17% más alta que aquellas que no lo hacen. Ayudarles en su desarrollo profesional y brindarles oportunidades de crecimiento, puede ayudarles a aumentar el interés, mejorar la motivación y convertir una plantilla poco activa en una más eficiente, competitiva y comprometida.
El primer paso en el diseño de un plan de desarrollo del personal es identificar las necesidades específicas de tu equipo. Esto implica reconocer las brechas entre las habilidades actuales de los empleados y aquellas que se requieren para lograr los objetivos de la organización, reconocer las áreas en las que los empleados necesitan mejorar y sus propias áreas de interés y desarrollo.
Sumado a ello, es necesario comprender las competencias necesarias para cada puesto y compararlas con las habilidades actuales de los empleados. De esta forma se revelarán brechas de manera mucho más precisa. Aprender cómo identificar las necesidades formativas de tu equipo en este artículo.
Una vez identificadas las necesidades de desarrollo, es fundamental establecer objetivos claros y específicos para cada empleado. Estos objetivos deben ser realistas, medibles y alineados con los objetivos de la organización. El establecimiento de metas claras va a ayudar a los empleados a comprender qué se espera de ellos y cómo su desarrollo contribuye al éxito general de la empresa.
En este punto es necesario desarrollar programas y actividades de desarrollo que se adapten a esas necesidades que identificamos en el primer paso. Estas actividades de formación pueden incluir cursos, mentorías o proyectos especiales. Lo importante en este punto es asegurarse de que las actividades que vas a incluir en tu plan sean interactivas, relevantes y personalizadas para satisfacer las necesidades individuales de aprendizaje de cada empleado. Además, asegúrate de ofrecer a los empleados la oportunidad de aplicar las habilidades y conocimientos recién adquiridos en situaciones reales para que el conocimiento tenga mayor significado.
CASO DE ÉXITO
Ayudamos a Grupo AKRON a impulsar el desarrollo de habilidades en su equipo
El seguimiento y la evaluación del programa son esenciales para medir la efectividad del plan de desarrollo del personal. Para llevar a cabo esta medición, puedes establecer puntos de control regulares para revisar el progreso de cada empleado y proporcionar retroalimentación constructiva para guiarlos en la dirección correcta. Si quieres saber cómo realizar una buena evaluación de capacitación echa un vistazo a esta guía práctica.
Debes poder ajustar tu plan cuando sea necesario, por lo cual la adaptabilidad es clave en la estrategia que vayas a implementar. Recuerda que las necesidades de desarrollo pueden ir cambiando con el tiempo debido a los cambios en la industria o en la organización.
Los planes de desarrollo del personal son una excelente forma de mejorar las habilidades y competencias de nuestros empleados, lo cual impacta directamente en el éxito de tu organización. Si estás listo para aprovechar todas las ventajas que te brindan estos planes, isEazy Skills te ofrece el catálogo más completo de cursos para mejorar las habilidades de tus profesionales. Mejora los resultados de tu formación a través de una experiencia de aprendizaje única con cursos interactivos y dinámicos, que mejoran en engagement y garantizan el aprendizaje de tu equipo. Empieza ya a impulsar el talento de tu equipo con isEazy Skills.
Un plan de desarrollo del personal es un programa que detalla las competencias y habilidades que los empleados deben adquirir para su crecimiento profesional. Este plan incluye objetivos específicos y acciones concretas diseñadas para alcanzar dichos objetivos. Generalmente, está estructurado en torno a la identificación de necesidades de desarrollo, la definición de metas claras y la implementación de actividades formativas, como cursos, mentorías y proyectos especiales, adaptadas a las necesidades individuales y a los objetivos de la empresa.
Implementar un plan de desarrollo del personal ofrece múltiples beneficios. Mejora la competitividad de la empresa al elevar las competencias de los empleados, incrementa la satisfacción del personal y reduce la tasa de rotación, ya que los empleados valoran las oportunidades de crecimiento profesional. Además, estos planes pueden aumentar la productividad al mantener a los empleados motivados y comprometidos, lo que se traduce en un mejor rendimiento y en un equipo más eficiente y alineado con los objetivos organizacionales.
Para identificar las necesidades de desarrollo del personal, es crucial realizar un análisis de las competencias actuales de los empleados en comparación con las habilidades requeridas para cumplir con los objetivos de la organización. Esto implica reconocer las brechas en habilidades, identificar áreas de mejora y entender las áreas de interés de los empleados. La evaluación de desempeño y las encuestas de feedback pueden ser herramientas útiles para determinar estas necesidades de manera precisa.
Las metas y objetivos en un plan de desarrollo del personal deben ser claros, específicos, medibles, alcanzables, relevantes y con un plazo definido (SMART). Estos objetivos deben alinearse con los objetivos generales de la empresa y las necesidades individuales de desarrollo. Establecer metas claras ayuda a los empleados a comprender las expectativas y cómo su desarrollo contribuye al éxito de la organización, proporcionando una dirección clara y motivación para alcanzar estos objetivos.
Las actividades formativas en un plan de desarrollo del personal deben ser variadas y adaptadas a las necesidades identificadas. Pueden incluir cursos en online, talleres, sesiones de mentoría, proyectos especiales y simulaciones prácticas. Es importante que estas actividades sean interactivas y relevantes, permitiendo a los empleados aplicar los conocimientos adquiridos en situaciones reales para maximizar el impacto del aprendizaje.
Para evaluar el éxito de un plan de desarrollo del personal, es fundamental establecer puntos de control regulares para revisar el progreso de los empleados y proporcionar retroalimentación constructiva. Utiliza métricas como el rendimiento en el trabajo, la satisfacción del empleado y la aplicación efectiva de nuevas habilidades. La flexibilidad y la capacidad de ajustar el plan en función de la retroalimentación y los cambios en la industria son clave para asegurar que el programa continúe siendo efectivo y relevante.
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