¿Cómo crear una cultura empresarial que favorezca el liderazgo femenino?

El liderazgo femenino no es una tendencia, es una necesidad. Cada vez más empresas apuestan por el talento y las habilidades de las mujeres, no solo por una cuestión de equidad, sino también por rentabilidad. Y es que, según McKinsey, las empresas con mujeres en puestos directivos tienen un 25% más de probabilidades de obtener una rentabilidad superior a la media.

Sin embargo, según datos del informe Women in Business 2023, solo el 32,4 % de los puestos de alta dirección están actualmente ocupados por mujeres. Esto demuestra que aún queda mucho camino por recorrer para alcanzar una verdadera igualdad de género en el liderazgo.

Pero ¿a qué nos referimos cuándo hablamos de liderazgo femenino? ¿Cómo puedes impulsarlo en tu empresa? Sigue leyendo para descubrir más.

¿Qué es el liderazgo femenino y cuál es su origen?

El liderazgo femenino se define como el ejercicio de roles de liderazgo por parte de mujeres dentro de organizaciones u otros contextos, donde se destacan atributos, habilidades y estilos de liderazgo asociados culturalmente con el género femenino.

Aunque el liderazgo femenino como concepto existe desde hace siglos, el término es relativamente nuevo. No hay un consenso claro sobre quién lo acuñó por primera vez, pero se cree que su uso comenzó a popularizarse a mediados del siglo XX, en el contexto del movimiento feminista. Desde entonces, las mujeres han desafiado las normas sociales y culturales que las relegaban a roles secundarios, abriéndose paso en diferentes ámbitos del liderazgo.

Marilyn Loden, Sally Helgessen y Helen Fisher fueron las primeras autoras que empezaron a abordar el tema del liderazgo y las mujeres.

Características principales del liderazgo femenino

Es importante destacar que el liderazgo femenino no se define por un conjunto de características estáticas, sino por la capacidad de las mujeres para adaptar su estilo a las necesidades y características de cada contexto.

Sin embargo, las investigaciones de Helgesen y Fisher han destacado ciertas fortalezas y habilidades habituales en el liderazgo femenino:

• Escucha: el liderazgo femenino se distingue por una habilidad notable para escuchar activamente a los miembros del equipo. Esta capacidad permite a las líderes comprender las preocupaciones, necesidades y perspectivas de los demás.
• Comunicación: las mujeres líderes suelen destacarse por su capacidad para comunicarse de manera clara, directa y empática.
• Trabajo en equipo: el liderazgo femenino se caracteriza por promover el trabajo en equipo y la colaboración entre los miembros del equipo.
• Empatía: las líderes femeninas tienden a comprender y responder a las emociones y necesidades de su equipo, lo que contribuye a establecer relaciones sólidas y de confianza dentro de la organización.

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¿Por qué es fundamental tener mujeres en puestos de liderazgo?

El actual escenario empresarial nos ha exigido nuevas formas de trabajar, pero también estamos asistiendo a un cambio en el estilo de liderazgo más tradicional. Hoy, las organizaciones necesitan líderes innovadores centrados en las personas, que sean capaces de escuchar y empatizar.

En este punto, los estudios demuestran que las mujeres tienen una gran habilidad para el desarrollo de soft skills clave en este nuevo estilo de liderazgo. Es el caso, por ejemplo, de la inteligencia emocional o las habilidades sociales, cada vez más importantes dentro de la empresa.

Gracias a ello, las líderes femeninas pueden reducir el agotamiento de los empleados, alentar, motivar e inspirar a sus equipos. Por otro lado, innumerables informes revelan que las organizaciones dirigidas por mujeres disfrutan de una mayor rentabilidad y tienen tasas de rotación más bajas, incrementando los ingresos y la productividad.

Beneficios clave del liderazgo femenino

Vamos al detalle. Según un informe de la Organización Mundial del Trabajo, las empresas que gestionan la igualdad de género en puesto directos obtienen los siguientes beneficios:

• Potenciar la innovación y la creatividad
• Lograr una mejor reputación interna y externa.
• Retener mejor a sus empleados y atraer mejores talentos.
• Tener un mejor desempeño económico.
• Generar diversidad de perspectivas y enfoques para la toma de decisiones.

Te contamos un poco más en el siguiente vídeo:

Las mujeres y el techo de cristal: ¿de qué trata este concepto?

El techo de cristal es una metáfora, acuñada por Marilyn Loden en 1978, que describe las barreras invisibles que impiden a las mujeres alcanzar puestos de alta dirección en las organizaciones. A pesar de los avances logrados en las últimas décadas, las mujeres siguen infrarrepresentadas en los niveles más altos de las empresas.

Las causas del techo de cristal son diversas y complejas. Algunas de ellas son:

• Estereotipos de género: Los roles tradicionales de género y la percepción de que las mujeres no son tan aptas como los hombres para ocupar puestos de liderazgo.
• Falta de oportunidades: Las mujeres tienen menos acceso a redes de apoyo y oportunidades de desarrollo profesional que los hombres.
• Dificultad para conciliar la vida laboral y familiar: La falta de flexibilidad en las empresas dificulta que las mujeres puedan compaginar su vida laboral y familiar.

¿Cómo impulsar el liderazgo femenino y romper el techo de cristal?

Impulsar el liderazgo de las mujeres dentro de la organización tiene claras ventajas competitivas, sin embargo, requiere de estrategias específicas para estimular e inspirar el talento. Por ejemplo:

• Abordar los desafíos y las competencias del liderazgo femenino. Ofrecer las experiencias y los recursos que necesitan las mujeres para ser eficaces en los roles de líderes.
• Promover la flexibilidad laboral frente a una carrera lineal. Animar al talento femenino a tomar la iniciativa sobre su futuro laboral, asumiendo responsabilidades y creando estrategias de desarrollo de liderazgo.
• Mejorar las oportunidades y la motivación de las mujeres profesionales. Así como crear una cultura de diversidad y compromiso por la paridad de género en toda la organización.
• Desarrollar programas específicos de liderazgo femenino que permitan compartir experiencias, apoyar la conversación y proporcione nuevas formas de pensar y actuar.
• Crear una red de networking adecuada que apoye el talento femenino, mejore el acceso a la información y de acceso a las promociones internas y a las nuevas oportunidades laborales.
• Ofrecer planes integrales de formación, enfocados en los desafíos y las competencias del liderazgo femenino, así como en temas de igualdad de género. Además, brindar orientación para el aprendizaje y llevar a cabo programas de mentoring y coaching.

En este vídeo, te contamos más:

Habilidades fundamentales para las mujeres líderes

Ahora bien, estas son algunas de las habilidades fundamentales que ayudarán a tus colaboradoras a triunfar:

• Liderazgo de equipos
• Gestión de crisis y resolución de problemas
• Gestión de las relaciones en la organización
• Capacidad de organización, planificación y gestión
• Visión estratégica
• Innovación
• Inteligencia emocional
• Comunicación asertiva
• Gestión de la diversidad

Ahora que ya sabes de qué se trata el liderazgo femenino y conoces sus beneficios, ¿quieres dar el próximo paso para potenciar a tus colaboradoras? En isEazy Skills te ayudamos a desarrollar el talento para conseguir mujeres líderes, capaces de crear entornos laborales más innovadores, colaborativos, empáticos, unidos y flexibles. Solicita una demo gratuita y descubre la formación en habilidades y conocimientos digitales que las futuras líderes necesitan.